lunes, 23 de enero de 2012

MOVADEF Y EL FRACASO DE SENDERO LUMINOSO.

¡POR LA UNIDAD SINDICAL CLASISTA!
Para nadie es un secreto que la amorfa organización denominada movadef, es el nuevo rostro legal de la facción de Sendero Luminoso que sigue siendo fiel a Abimael Guzmán, y que busca ser reconocido por el Jurado Nacional de Elecciones para poder participar en los procesos electorales.
El simple hecho de que la facción gonzalista de Sendero Luminoso haya dado este paso, es reflejo de la bancarrota ideológica de la organización fundada por Abimael Guzmán en enero de 1969. Para decirlo con palabras de Abimael, el surgimiento del movadef “es el amoldamiento a las cloacas del orden viejo”, ese viejo orden que supuestamente iban a ser barridos por la acción violenta de las huestes senderistas.
En la concepción ideológica original de SL desarrollado por Abimael Guzmán, la guerra popular era la única forma posible para tomar el poder. En su discurso, “somos los iniciadores”, Abimael anunciaba que “la violencia de la revolución, se apresta a definir su contienda por las armas”.
Para conseguir tal objetivo, Abimael desarrolló la absurda idea de “la militarización del partido a través de las acciones”. En el pensamiento de Abimael no cabía la posibilidad de que la lucha política tuviera otra forma de manifestarse que no sea a través de la lucha armada. Para justificar tal idea, llegó al extremo de sostener que la violencia era una ley universal, y que por lo tanto la tarea de SL era desarrollar la guerra popular, no solo en el Perú, sino a nivel mundial. En su ecléctica visión del mundo, Abimael presentó el inicio de su lucha armada como “la esencia de lo nuevo”, y asumió de manera fanática que “El Partido ya no podrá desarrollarse más sino a través de las armas, a través de la lucha armada”.
Con esa irracional visión, Sendero Luminoso transformó inhumanamente la política en un espacio manchado de sangre. Su desprecio absoluto por participar en las elecciones, no solo los llevo a intentar boicotear los procesos electorales, sino que como parte de su práctica del terror indiscriminado, llegaron al extremo de justificar la política de “aniquilamiento masivo” como una forma de “generar vacío de poder”.
Bajo esa lógica del terror, asesinaron a cientos de “alcaldes electos por el pueblo” y dirigentes populares.
Abimael Guzmán justifico políticamente los asesinatos sosteniendo que “con él se descabeza el funcionamiento del aparato estatal o se le paraliza; algunos, los reaccionarios y sus comparsas los oportunistas, dicen "cómo es posible asesinar vilmente a alcaldes electos por el pueblo", primero, debe plantearse que elección implica instrumento del sistema democrático burgués que es reaccionario, en nosotros nunca va a florecer la estupidez política de quienes hablan solamente de dictadura cuando no hay elecciones”.
Pero por lo visto, con la lenta metamorfosis de SL en movadef empieza a “florecer la estupidez política”, puesto que el proceso de reciclaje de la vieja política senderista de guerra popular en el novísimo movimiento electoral senderista, es el resurgimiento de lo viejo, de lo podrido, del oportunismo ramplón, de todo lo que Abimael combatió. Es la bancarrota total del viejo proyecto senderistas que quiso incendiar las praderas y en su accionar dejo una estela de muertes.
Movadef es simplemente la negación de esa arenga que llamaba a “convertir el verbo en acciones armadas” y que con el dedo acusador conminaba a las huestes senderistas: “o nosotros cumplimos lo que prometimos o seremos hazmerreír, fementidos, traidores”.
Abimael, el fundador de Sendero Luminoso prometió guerra popular y se dedicó a quemar las ánforas electorales y teñir de sangre la patria; Alfredo Crespo, fundador de movadef es el hazmerreír que anuncia Abimael y busca el reconocimiento legal para Sendero Luminoso; pero ambos representan la bancarrota total del proyecto senderista.